LOS PRIMEROS FILÓSOFOS GRIEGOS
LOS PRESOCRÁTICOS
Por tradición fueron denominados filósofos presocráticos por referencia anterior a Sócrates, aquellos pensadores griegos, que hicieron una ruptura en la forma de interpretar el mundo desde procedimientos racionales en contraposición a los empleados tradicionalmente que partían de supuesto mítico religiosos, alrededor del 640 al 360 a . C.
El problema fundamental de los filósofos presocráticos, fue la búsqueda del
“ARJE” (origen o principio), de las cosas que son comunes a todos. “A pesar de la unidad aparente de todos los seres intuyeron una unidad subyacente y profunda y se dedicaron a buscar la naturaleza y la causa de esa unidad, su preocupación gira en torno a la naturaleza, observan los fenómenos y advierten en ellos ciertas repeticiones, ciertas constantes, que pueden hoy denominarse leyes” ( ROZO VALENCIA, Wilmer (2007) . Módulo de Filosofía Antigua. Unad. Bogotá).
Se denomina jónicos o físicos a los pensadores ubicados en la escuela de Mileto, los principales representantes son: Tales de Mileto, Anaximandro y Anaxímenes.
TALES DE MILETO
(624/23 – 546/45 a.C.)
La tradición lo considera uno de los siete sabios de la antigüedad.
Predijo un eclipse de sol alrededor de mayo de 585. Para Tales “el principio es el agua”, afirmaba que la tierra se sostiene sobre agua, que todas las cosas son húmedas y que lo cálido se engendra y vive en la humedad, observó que las semillas son de naturaleza húmeda.
ANAXIMANDRO DE MILETO
(610/9 – 546/45)
EL APEIRÓN O LO INDETERMINADO
Político y astrónomo contemporáneo de Tales, se le considera el primer escritor filósofo de Grecia. Fue quien utilizó por vez primera el término ARJE (arché, principio), para referirse ala sustancia que lo origina todo, que para el era el infinito y eterno (apeirón). Este elemento sostiene todas las cosas, además de originarlas, las gobierna y se disuelve al final de su existencia. El apeirón no constituye materia, es de procedencia divina.
ANAXÍMENES DE MILETO
(585 – 524 A .C.)
EL AIRE ES LA SUSTANCIA
Concreta la idea del apeirón en “el aire”, del que se desprenden todas las cosas, debido a los procesos naturales de condensación y expansiones sucesivas de los elementos de la naturaleza.
El aire tiene las mismas características del apeirón de Anaxímenes, la infinitud y el movimiento perpetuo que animan al mundo cíclicamente haciendo hacer las cosas y, de nuevo conformándolas luego de su desaparición.
HERÁCLITO DE ÉFESO
(544 – 484 A .C.)
EL CAMBIO INCESANTE DE LAS COSAS
Según la historia de la filosofía, la especulación de la escuela jónica, culmina en la doctrina de Heráclito. El principal aspecto de su obra jira alrededor del devenir de las cosas que pasan. “El mundo es un flujo perpetuo: no es posible meterse dos veces al mismo río no tocar dos veces la misma sustancia mortal en el mismo estado; a causa de la velocidad del movimiento, todo se dispersa y se recompone de nuevo, todo viene y va” (Gemma, 1982. p: 30).
La sustancia o principio de lo existente es el fuego, que debe explicar en su esencia el inicio y fin de las cosas del mundo. Pero el fuego no debe entenderse no solo como sustancia material, sino como sustancia transformadora. El fuego es “un principio activo, inteligente y creador. Este mundo, que es el mismo para todos, no ha sido creado por ninguno de los dioses ni de los hombres, sino que fue siempre, es y será fuego eternamente vivo que se enciende según un orden regular. Así que el cambio es un salir del fuego o un retorno al mismo” (Gemma, 1982, p: 30).
ESCUELA PITAGÓRICA
Esta escuela fue fundada por Pitágoras de Samos en Crotona, sur de Italia hacia el 530 a . C., es la primera que siente las bases para la conformación de la ciencia matemática.
“La escuela pitagórica es conocida por el Teorema de Pitágoras, sus conocimientos sobre la armonía musical, los números primos y sus conocimientos sobre astrología. Como no se llevaban actas escritas, solo se conocen los resultados presentados por terceros, de manera que no queda claro si fueron producto de Pitágoras mismo, de otros miembros de la escuela o el resultado de un esfuerzo colectivo”.
PITÁGORAS DE SAMOS
(582 – 507 A .C.)
EL NÚMERO
Fue el primero según la tradición en llamarse a si mismo, filósofo. Pitágoras fue originario de la isla de Samos en el mar Egeo, que, bajo el gobierno del rey Polícrates, emigra al sur de Italia estableciéndose en Crotona donde pudo construir su escuela sin la influencia y determinación político administrativa a la que se vio sometido en su isla natal.
La escuela pitagórica poseía un carácter eminentemente religioso lo que permitió el fundamento de sus investigaciones bajo supuestos estrictos, considerando que lo que une a todos los seres en el universo es la relación que entre ellos se establece y esas relaciones se hacen a través de los números que se expresan y manifiestan de forma ordenada y proporcional.